bultos
Bultos o Abscesos
Un absceso es una acumulación localizada de pus en cualquier parte del cuerpo.
Su forma es redonda, de color rojizo y se presenta como una inflamación.
Los abscesos pueden ser internos o externos y dependiendo de ello y de su tamaño será más o menos grave su aparición, ya que puede traer consigo otra enfermedad, aunque en líneas generales en los roedores son de índole externa localizados en la piel, sin embargo ante la detección de cualquier bulto en nuestra Chinchilla debemos acudir al veterinario con la mayor brevedad posible para no comprometer la vida de nuestra mascota.
En las chinchillas suelen aparecer abscesos en el morro (parecen granos), en la mandíbula y detrás del cuello.
Los abscesos ocurren por varias razones, lo primero a revisar es que no sea una astilla de las maderas de la jaula, el siguiente paso es concienciarnos de que la Chinchilla es un animal para acariciar suavemente no para estrujarlos o jugar con ellas como perros ya que el pasar la mano presionando a la Chinchilla le hace producir más cebo lo cual hace una acumulación en su piel y aparecen los abscesos; igualmente hay que revisar que su dieta sea la adecuada y no descontrolarla con excesos de grasas o vitaminas. En segunda instancia debemos entender que las bacterias están por todas partes por lo cual la higiene de la casa, de la Chinchilla, su jaula y sus accesorios es imprescindible, aun así puede que estas bacterias lleguen a ellas, ya que vivir en un ambiente estéril es imposible. Igualmente debemos revisar que no se deba a una herida bien por una mordedura de otra Chinchilla, un rasguño o incluso la picadura de un insecto. En líneas generales, la bacteria que más se ha encontrado en los abscesos es la denominada Staphyloccus aureus son las bacterias más comunes encontradas en un absceso, aunque hay otras especies de bacterias que se pueden cultivar en él, lo importante a tener en cuenta es que pueden causar una dermatitis ulcerosa de no tomar cartas en el asunto y derivar en aseptisemia y la consecuente muerte del animal, pero de llevarlo al veterinario las estadísticas de recuperación son excelentes.
Ante un absceso “SIEMPRE” debemos acudir al veterinario y no intentar exprimirlo o manipularlo ya que podemos empeorar la situación o empujarlo más adentro causando una enfermedad mucho más seria, de igual forma ocurre con la medicación.
Para prevenir esto es bueno estar pendientes de las maderas, ganchos y metales dentro de la jaula que no exista nada punzante, abrasivo, áspero, ni astillable en la misma, retirar el material fecal diariamente y alimentos que estén fuera de su bote de pienso. De igual forma se debe desinfectar una vez a la semana la jaula con una mezcla de jabón neutro vinagre y agua.
Cualquier alambre debe ser retirado de la jaula, y evitar las piedras de calcio, es preferible suministrarles el calcio en pastillas o huesos de sepia.
La botella de agua debe estar perfectamente limpia y desinfectada cada 2 días y cualquier herida debe ser limpiada con agua y revisada por el veterinario.
Finalmente dentro de la alimentación de la Chinchilla debemos tener en cuenta que para que su sistema inmunológico funcione a la perfección debemos dar un mínimo de 150-200 mg a cada Chinchilla de vitamina C y complementar con escaramujos, pétalos de rosas y zanahorias.